Ser mamá: ¿Trabajar o quedarse en casa?

Hola a todas las mujeres y mamitas que me leen en este blog, para las que no me conocen, ni nombre es Lizeth, soy mamá de un hermoso niño de 7 años.

Soy mamá soltera y hace dos años, mi madre muere de un cáncer super agresivo.

Tanto a mi hijo como a mi nos dio muy duro, pues como entenderás era mi madre, el ser mas amado para un hijo y era la abuelita materna de mi niño, y por supuesto era como otra madre para el.

Mi mamá además de ser tan buena madre y abuela amorosa, era mi ayuda, mi sostén.

Cuando eres mamá y sobre todo madre soltera que necesitas trabajar, necesitas ayuda con tus hijos, y eso era lo que hacía mi madre. Ayudarme incondicionalmente.

Para ese entonces, tenia la fortuna de estar aún en casa de mis padres con mi hijo.

Cuando mi madre empieza a enfermar, gracias a Dios me salió mi proyecto de casa propia.

A pesar del duro momento por el que estábamos pasando, mis padres y yo estábamos contentos de ver como a pesar de estar sola con mi hijo, pude lograr tener un techo para los dos y como dicen por ahí: empezar de cero.

Poco a poco con mucho esfuerzo y dedicación empecé a remodelar mi apartamento y cuando terminé con el apoyo de mi mamá, me dice que me mudé que ella iba a estar muy bien, que siguiera luchando por mis sueños.

Lo hice, le hice caso a mi madre, sobre todo porque en realidad nuestras casas estaban muy cerca, así que cualquier cosa que ella necesitara, sabía que podía contar conmigo en todo.

Todo ello sucedió en pandemia, así que por fortuna en ese momento trabajaba desde casa y podía estar al pendiente de la salud de mi madre y acompañar a mi hijo en sus clases virtuales.

Desde muy joven siempre me ha llamado la atención el emprendimiento y tener calidad de vida para brindarle a mis hijos y una futura familia si Dios lo permite.

Por fortuna para el año 2019 decido emprender de manera digital y con mucha perseverancia empiezo a ver el resultado de este emprendimiento un par de meses después. Definitivamente, la perseverancia es la clave del éxito.

Por ello, mi apartamento pude remodelarlo gracias al trabajo que tenia en ese momento y al emprendimiento digital que estaba desarrollando.

Construí mucho y fui feliz en medio de la tormenta de una enfermedad terminal que nos golpeó y nos afectó muy fuerte como familia, ya sabes la madre es como esa columna vertebral donde reposa todo.

Pasó el tiempo, mi madre empeoraba cada vez y muere en enero del 2022.

Por fortuna, antes de morir pude decirle las siguientes palabras:

«Mamita hermosa, estoy feliz, porque voy a renunciar de mi trabajo para dedicarme 100% a mi emprendimiento», recuerdo perfectamente que cerró sus ojitos y se sonrió.

Sé fue con esa satisfacción.

Te preguntarás ¿Pero que tiene que ver todo con el título de este post?

Tiene que ver y mucho!!

Como te darás cuenta la vida nos pueda dar un giro completamente de un momento a otro, en mi caso fue la muerte de mi mamá, que como te mencioné era el único apoyo incondicional en cuanto al cuidado de mi niño cuando yo lo necesitaba.

No todas tienen una segunda fuente de ingresos hoy día que les permita tener seguridad financiera en caso dado tengas un despido en el trabajo.

Obvio deseo que a todas las mujeres que salen a trabajar les vaya muy bien y aprovecho y les digo que las admiro muchísimo por todo lo que hacen, pero si es bueno que consideres una segunda opción para mejorar tus ingresos y tener una seguridad en caso dado la vida cambie de un momento a otro.

Hoy día vivo de mis emprendimientos y gracias a ellos, soy mamá tiempo completo con mi hijo.

No todas tienen que serlo, pero que bonito sería que tengas un trabajo que te permita compartir calidad de tiempo con tu familia y con tus hijos.

No se trata de juzgar a las mamitas que trabajan o aquellas que deciden quedarse todo el tiempo en casa, de hecho, vuelvo y repito, admiro ambos roles.

No importa el rol en el que te encuentres hoy:

Ama de casa y mamá profesional y trabajadora, lo importante es que en medio de tus ocupaciones y prioridades recuerdes que tus hijos son importantes y que la comunicación es de vital importancia en estos momentos donde las pantallas son los que tristemente en algunos casos están educando a nuestros niños.

Recuerda que sea en el rol que estés.

  1. Un poco de trabajo puede esperar, en el trabajo somos reemplazables, mientras que para nuestros hijos somos su mundo, merecen todo tu afecto y tu compañía
  2. La clave es la organización: Soy muy creyente de la efectividad del hábito de tener una agenda con todas nuestras ocupaciones de la semana, trata de hacer una lista de todas tus actividades enumerando de primero la de mayor importancia hasta la menos importante, entre ellas por favor te en cuenta pasar tiempo con tus niños.
  3. Para las mamitas que trabajan, considera tener un trabajo desde casa o trabajar en el mismo trabajo que tienes y empezar a mirar opciones de emprendimiento en las actividades que mas disfrutes, no se trata de emprender y ya, se trata de disfrutarlo para que los resultados sean mejores y más efectivos.

Para concluir, todas somos las mejores mamitas del mundo, no importa a lo que dediques o decidas ser por el resto de tu vida, lo importante es no dejarse absorber por el mundo de ocupaciones que demandan este mundo tan acelerado en el que vivimos, y tener el hábito de la organización para que al terminar nuestra semana sintamos esa gran satisfacción de que a pesar no hemos terminado todo, hicimos de eso tan importante un poquito cada día y ESO está muy bien. ¡Verás la eficacia y los resultados con el pasar del tiempo!

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